Es posible que nunca hayas escuchado el término calidad o monitoreo del agua antes, o puede que lo hayas escuchado pero no comprendas bien lo que implica. No te preocupes, a continuación conoce la importancia de la calidad del agua, cuáles son los principios básicos y un par de consejos para mejorarla.
Agua: una de las necesidades básicas de la humanidad
El agua es una de las necesidades fundamentales para el sustento de las personas. Las Naciones Unidas incluso reconocen el acceso al agua y al saneamiento como derecho humano, lo que refleja el papel crucial del agua en la vida humana. Sin embargo, la humanidad se enfrenta a varios desafíos a medida que las fuentes y la disponibilidad de agua se converten en un problema urgente que debe abordarse.
Escasez de agua
Es difícil acceder al 97% del agua de la tierra porque es agua salada del océano o agua dulce que estaba encerrada en forma de glaciares y hielo.
Según la ONU, la escasez de agua ya afecta a todos los continentes, y un número cada vez mayor de regiones está llegando al límite en el que los servicios de agua pueden prestarse de forma sostenible.
Algunas personas tienen que caminar muchas millas para tener acceso a agua limpia y segura. De hecho, más de 2000 millones de personas viven en países que experimentan un alto estrés hídrico, afirma la ONU.
Agua segura
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el agua no potable y el saneamiento e higiene inadecuados contribuyen significativamente a las 485.0000 muertes causadas por diarrea cada año.
Además, a nivel mundial, se estima que la fuente de agua potable de al menos 2 mil millones de personas está contaminada con heces, de ahí la importancia de la calidad del agua y su monitoreo constante. Las bacterias, los virus y los parásitos pueden ingresar al agua potable de muchas maneras, como las fugas de aguas residuales, las aguas residuales sin tratar que se eliminaron directamente en los cuerpos de agua e incluso el manejo antihigiénico de las fuentes de agua almacenadas.
Calidad del agua
La calidad del agua se puede definir como una medida de la idoneidad del agua para un uso particular, en función de las características:
- Físicas: temperatura, color, luz, sedimento suspendido en el agua.
- Químicas: oxígeno disuelto, nivel de acidez (pH), salinidad, nutrientes y otros contaminantes.
- Biológicas: bacterias, algas.
Monitoreo del agua: por qué y cómo
La calidad del agua es uno de los factores más importantes en un ecosistema saludable. El agua limpia sustenta una diversidad de plantas y vida silvestre. Aunque al principio parezca no estar relacionado, nuestras acciones en tierra afectan la calidad de nuestra agua. Los contaminantes, el exceso de nutrientes de los fertilizantes y los sedimentos con frecuencia se transportan a los lagos y ríos locales a través de la escorrentía de las áreas urbanas o los campos agrícolas.
El monitoreo del agua es importante para asegurarse de que las personas tengan acceso al agua potable.
Además, monitorear la calidad del agua puede ayudar a los investigadores a predecir y aprender sobre el ciclo natural del agua en el medio ambiente, así como a determinar los impactos humanos en el proceso. Estos esfuerzos de medición también pueden ayudar en proyectos de restauración o a garantizar que se cumplan los estándares ambientales.
¿Cómo determinar la calidad del agua?
Existen kits de prueba que se pueden solicitar y utilizar para monitorear los recursos hídricos. Este tipo de kits miden 4 características del agua:
Temperatura (en grados centígrados): los organismos acuáticos como peces, insectos y caracoles son sensibles a los cambios en la temperatura del agua.
Acidez – pH: la medida del pH es una medida de la cantidad de iones de hidrógeno (H +) presentes en una sustancia como el agua. Conocer la cantidad de hidrógeno en una sustancia nos permite juzgar si es ácida, neutra o básica.
Oxígeno disuelto: una pequeña cantidad de oxígeno, alrededor de diez moléculas de oxígeno por millón de moléculas de agua, se disuelve en agua. Los peces y los organismos microscópicos necesitan oxígeno disuelto para sobrevivir.
Turbidez: es la cantidad de partículas (como arcilla, limo, plancton u organismos microscópicos) suspendidas en el agua.
Conductividad específica: la conductividad específica mide la capacidad del agua para conducir una corriente eléctrica. Depende de qué cantidad de sólidos disueltos se pueden encontrar en el agua.
Dureza: la cantidad de calcio y magnesio disueltos en el agua determina su «dureza». La dureza del agua varía de región en región.
Sedimento en suspensión: el sedimento en suspensión es la cantidad de suelo que circula en el agua. La cantidad depende en parte de la velocidad del flujo de agua.
Otra percepción general de la calidad del agua indica si el agua está contaminada o no. La contaminación industrial es una de las principales causas de la contaminación del agua, así como de la escorrentía de las zonas agrícolas, la escorrentía de aguas pluviales urbanas y la descarga de aguas residuales no tratadas (especialmente en los países en desarrollo).
¿Cómo mejorar la calidad del agua en casa?
El agua que llega a los hogares, viene de la red pública, la cual está constituida por varias tuberías y conexiones que la conducen por toda la ciudad. Aún cuando pasa por diferentes sistemas de tratamiento, puede que en algunas zonas, el agua potable no tenga la mejor calidad y no pueda ser ingerida por las personas.
Por ello, es importante instalar filtros y purificadores en casa, que ayudarán a devolverle la calidad, eliminando virus y bacterias, así como olores y sabores. Además, depende del modelo que elijas, puedes mejorar la alcalinidad del recurso.
Conocer el catálogo de purificadores de Rotoplas te ayudará a decidri cuál es el mejor para adaptarse a tus necesidades y así, tener agua de buena calidad en todo momento y lista para beber.